Montaña y Aventura - experiencias inolvidables a través de la conexión con la naturaleza: VOLCAN TECUAMBURRO

REPORTE VOLCAN TECUAMBURRO
Por: Roberto De León

Sabado 4:30 de la mañana y no deja de llover, la incertidumbre de lo que puede pasar durante el día y una actividad de montaña que esta por iniciar, 5:30 de la mañana y apenas una tenue llovizna da la esperanza de que el tiempo puede cambiar.

6:15 parado frente a Burguer de Gran Vía, esperando que la gente que confirmo llegue, pero la indecisión o duda hace presa de ellos y algunos deciden por renunciar. Uno a uno van llegando los que si confiaron en el buen tiempo, nuestro transporte también se hace presente y luego vamos con rumbo a VOLCAN TECUAMBURRO, el cielo presenta una nubes grises con amenaza de lluvia, pero solo eso, luego una ventana de un sol tibio nos devuelve la sonrisa y nos aporta energía.

Después de 84 kilómetros abandonamos la carretera asfaltada y avanzamos en terracería, no fue mucho pero algo es algo, el micro se atasco y ya no dio mas, lo sacamos y lo pusimos en dirección de regreso y le dimos una patada en el trasero, lo devolvimos a Guatemala, no si antes decirle que mañana lo esperábamos en el mismo lugar a las dos de la tarde.

a punto de emprender la marcha un “picop” nos regala un “jalón” hasta la aldea Ixpaco de donde iniciamos nuestra gran aventura.

Después de caminar por un poco mas de dos horas llegamos a Tecuamburro (Aldea) dejamos nuestras mochilas y con mochila de asalto iniciamos el ascenso a la primera cumbre La Soledad, la oficial de l,962 m.s.n.m.; por una vereda muy verde, pues no se veía por lo tupido de la vegetación y mas adelante adivinando y entre un bosque bastante ralo avanzamos hasta llegar a la cumbre, nuestra sorpresa es que hay muchos arboles que no murieron de pie, están tendidos en muy cerca de donde nacieron, una cumbre muy reducida por las piedras que identifican a la misma, sentimos frio por el viento y una brisa que nos acaricia el rostro; La foto de cumbre y para abajo, escondidos entre el bosque protegidos del viento y a la par de algunos cadáveres (arboles) mitigamos el hambre y la sed. Continuamos buscando una hondonada y retomar el sendero de ascenso que abrimos, así hasta llegar a la carretera empedrada.

Al terminar de bajar de la Soledad, solo atravesamos la carretera y buscamos una talanquera para iniciar el ascenso a la segunda cumbre MIRAFLORES de l, 945 m.s.n.m. Un camino de herradura hoy convertido en un sendero muy angosto, varios derrumbes y agua por todos lados, mas arboles tapando el camino y nosotros buscando como sortearlos. Por fin alcanzamos la parte alta de un camellón y ahora buscar la entrada a la cumbre, nos metimos en un espacio que parecía la entrada y poco a poco avanzamos entre los arboles siguiendo una huellas (no humanas) pero que si permitía avanzar hacia arriba, caminamos un largo techo y la duda empezaba a corroer mi mente - Sera que estamos cerca o nos pasamos- Así durante unos cuantos minutos hasta que por fin una vereda bien marcada que nos lleva a la cumbre y que “OTRA SORPRESA” Se robaron la torre de triangulación y solo dejaron las patas de donde fue cortada y un disco de bronce que dice “Instituto geográfico nacional”; Así que esta es la cumbre, unas fotos y nuevamente para abajo, la amenaza de lluvia solo fue de unos cinco minutos, tomamos nuevamente la vereda por donde subimos con tan mala suerte que se termino y decidimos continuar por el mismo filo de la montaña que nos llevo mucho a la izquierda, luego una hondonada, después unas caídas de agua y así, seguimos avanzando con la esperanza de encontrar la vereda que no se ve desde el principio, encontramos a nuestro paso un enorme derrumbe y no quisimos atravesarlo, debimos subir unos cien metros y pasar encima de donde se origino, continuamos y la vereda no aparece, luego encontramos plantación de café y no hay vereda, después una área de milpa y tampoco hay vereda, seguimos bajando y otra plantación de café, se nos termina, la plantación de café, se termina, la luz del día, se termina la paciencia, se termina la bajada y una caída enorme, hay que bordear para bajar por donde si se puede caminar (resbalar), así seguimos, no tenemos nada que nos oriente mas que seguir bajando con la esperanza de llegar a algún lugar que nos indique por donde estamos bajando. Las luces de la Aldea Ixpaco, se ven a lo lejos, el ruido del agua que corre de un rio, se escucha, estamos consientes que la vereda quedo muy atrás y muy alto, ahora solo es de continuar y buscar una salida, decidimos que llegar al rio es lo mejor, así lo hacemos y cuando llegamos al rio nos encontramos que no podemos bajar porque esta muy alto, no tenemos luz, somos seis y solo hay una lámpara, dos teléfonos celulares hacen lo que pueden con la pantalla, una raíz de unos diez metros de largo nos permite ayudarnos para bajar al rio y uno a uno vamos hasta tocar el agua, continuamos entre el rio, salvamos el obstáculo de un árbol sobre el rio y seguimos avanzando, luego vemos una serie de piedras todas “amontonadas” pero podemos caminar sobre ellas y luego la gran sorpresa LA CARRETERA, Bien estamos salvados, solo tenemos que subir por ella. El desvío fue a penas de un metro arriba y abajo fue menos de un kilometro, llegamos a la aldea Tecuamburro recogemos nuestras mochilas y continuamos para peña blanca donde montamos nuestro campamento, cuatro carpas instaladas, un poco de calor, muchas estrellas y una parrilla con mas de diez pinchos, tortillas, carne, te, longanizas, atún, etc. No se si fue un festín por estar sanos y salvos o porque así hay que pasarla bien en la montaña. (FOTO # 02)

Domingo, muy temprano 6:00 de la mañana, nos levantamos y podemos apreciar esa naturaleza pura, un ambiente lleno de arboles y aire fresco, varios domos muy blancos haciendo contraste pero dándole ese realce a la laguna que tiene mas de tres metros de profundidad, arboles entre el agua, una laguna que esta a pocos metros de juntarse con la otra, “la escondida”. Nosotros caminamos sobre los domos y parte del bosque buscando la entrada (vereda) hacia la otra cumbre Peñas Blancas de 1,945 m.s.n.m. Esta si esta bien marcada, pero tiene mucha vegetación y una cantidad increíble de arañas, que tejieron sus telas para agenciarse del sagrado alimento; Poco a poco sin que nos cansemos y sin sudar llegamos al mirador, que tiene una vista increíble, se aprecia todo el litoral del pacifico, Chiquimulilla y varias montañas, también el rio los Esclavos, tenemos un día despejadisimo, la verdad que el haber tomado la decisión de venir a conocer este volcán fue muy buena porque Dios nos esta regalando un par de días maravillosos, lo de ayer solo fue una lección de vida que nos hará fuertes y con experiencia, (algo que contar a los nietos). Continuamos nuestro ascenso en zigzag, ganando esa altura a pulso, porque vamos bañados en sudor, quitándonos las telas de araña de la cara, quitando maleza, ramas y espinas; Nada nos detiene, llegamos a la cumbre falsa y por fin la tercera y ultima cumbre Peñas Blancas; Ahora si actos de cumbre, fotos y el abrazo de felicitación una breve explicación de lo que es este complejo de las montañas de Chiquimulilla. Nuevamente para abajo, llegar al campamento, continuamos con la cena porque no se termino ayer, aparte de la avena por supuesto y de una deliciosa taza de te.

Seguimos apreciando el paisaje este campamento esta estratégicamente instalado, porque vemos todo en su verdadero esplendor. Llego la hora de partir, botar campamento y de repasar nuestros pasos que nos trajeron a este maravilloso lugar. Llegamos a la Aldea Ixpaco y seguimos caminando hasta la Laguna azufrada, un baño de azufre, tibio, caliente o hirviendo (gusto del cliente). Nuevamente las mochilas a la espalda y a seguir caminado hasta donde nos espera el microbús, de regreso a la carretera asfaltada, un almuerzo en Barberena y luego la llegada a la ciudad capital, todos sanos y salvos.